Pienso que ahora estarás dormida. Soñando con mundos irreales, viajando por cielos llenos de estrellas de caramelo y un océano de colores esperándote abajo. Dormida, en medio de incontables sitios fantásticos, viviendo aventuras increíbles con un sinfín de criaturas asombrosas. Igual solo puedo imaginarte dormida, con una sonrisa dibujada en tu rostro y con tu cabello esparcido por la almohada, como un fragmento de noche que se estrelló en medio del instante. Dormida, soñando con el futuro, con la esperanza... Yo aquí sigo despierto sin saber en qué soñar, pero pensando en ti. Dulces sueños.
Pertenecemos a nuestros actos, a nuestros días, a nuestros sueños. Mis ideas siempre han sido como un montón de moscas viajando de un lado para otro, en desorden. Es hora de encender una luz para atraerlas a todas