Una hiedra trepando el muro, no conozco de fronteras, tengo raíces, no las olvido. Trepo los muros, los que alrededor de mí crean, con los que me tratan de encerrar. No soy de aquí, no soy de allá. Soy de algún lugar entre el antes y el ahora. Soy un poco de aquí, soy un poco de allá. Tengo sueños a este lado, tengo ilusiones al otro. La hiedra quiere derribar los muros, quiere que los sueños sin fronteras se miren a los ojos, quiere enredarse en ambos mundos.
Pertenecemos a nuestros actos, a nuestros días, a nuestros sueños. Mis ideas siempre han sido como un montón de moscas viajando de un lado para otro, en desorden. Es hora de encender una luz para atraerlas a todas