Cayendo, cayendo. Nada bajo mis pies. Un nudo en mi garganta, mi estómago flotando. Vacío alrededor de mí, cayendo cada vez más rápido. Nada bajo mis ser, nada bajo mis pies. Un segundo convertido en una eternidad, Todos los sonidos son uno y son nada, se convierten en viento. Nada para sostenerse, mis manos se aferran al aire. cayendo, cayendo. Mi ser no vuela, solamente cae. Solo desciende cada vez más profundo, cayendo, cayendo.
Pertenecemos a nuestros actos, a nuestros días, a nuestros sueños. Mis ideas siempre han sido como un montón de moscas viajando de un lado para otro, en desorden. Es hora de encender una luz para atraerlas a todas